Desde que he vuelto
me exiges todas las partes
me exiges todas las partes
como si no supieras
que es imposible recomponer
los añicos de un jarrón
que estalla.
Desde que he vuelto
me echas en cara mis aspirinas
pero tú también tienes las tuyas:
el diacepán, ese polvo blanco
que peinas sobre el espejo
en las noches alteradas
o simplemente un viaje
que le devuelve a la vida
el sabor
como una pastilla maggi.
Desde que he vuelto rezo
por las aspirinas
que me has robado.
Desde que he vuelto rezo
por las aspirinas
que me has robado.
13 comentarios:
Quizá esas cosas existan si te vuelves a marchar.
En este poema se nota lo que está mejorando tu poesía en los últimos meses. Y mola.
genial lo del peinar. y más
besos
sí, señor, genial el poema.
Un rezo con destino, un rezo peinado en los salones de belleza del querer.
SL
gh, lo intento, lo intento, la maleta espera siempre al lado de la puerta... sólo es cuestión de atravesar el umbral.
gracias jorge, te peino a ti los pelos y esas cosas tan lindas que tienes dentro. xxxx
gracias, yolanda.
salones de belleza del querer, qué lindo, amigo, qué lindo.
cómo mola cantarle versos a los medicamentos!
do not leave (us) (me) unattended like the bugagge...
expósito
polarporn,
todos tenemos nuestros medicamentos, precisamente, aspirinas diacepán cocaína o pornografía, ahí andamos... gracias por el link!
expósito, el equipaje no debe ser desatendido, nunca, él es nuestro fiel amigo, única pertenencia en un mundo que se ha vuelto frío, peluche tibio que saluda por la mañana, nieve escondida, sangre que palpita acompasada.
expósito no desatiende el equipaje, sólo ha decidido sentarse sobre la maleta y esperar en medio de una llanura, mira al cielo y espera que alguien construya una carretera o plante un árbol. aquí había flores y hubo una plaga de corderos -se dice.
pero sigue esperando.
Publicar un comentario