tenemos un pacto (y vamos a cumplirlo).


Enmohecen los versos
y también nuestra felicidad
pero nadie nunca lo sabrá.


¿A quién le importa la verdad de los ojos cerrados? 
¿A quién le importa la letra pequeña del contrato?


Acaríciate el pelo
Y el mundo seguirá rodando


Este es nuestro pacto:

Que los dedos sobre tu pelo
no atisben nunca el final de la vida. 

 Cromosoma luna.





2 comentarios:

yolandasaenzdetejada dijo...

Esto es precioso, me ha hecho volar. Gracias...

José María Feliu dijo...

Sí Ana-Lisa, olvida si quieres aquellas maravillosas Ray-Ban negras; no rayes tu busto con aquella camiseta de marinera... Pero mésate el pelo, mésatelo para que el mundo siga rodando...