Ella nunca lo haría II


Gracias a Emilio, mi mecenas y gurú espiritual, aparte de excelente diseñador y publicista, compañero de sesiones de meditación zen que fueron sustituidas progresivamente por cigarrillos y gin and tonics.

4 comentarios:

mudo dijo...

no me abandones. yo nunca lo haría.

mudo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Annalisa Marí dijo...

non ti preocupare. te llevo incrustado en las telarañas que inundan mi cuarto, y en las horas felices de los bancos del parque en invierno.

Anónimo dijo...

Hola abandonada... no te rindas. mañana en la biblioteca de babel a las 20.00 Dostoivesky. Te apuntas?

La maga