Encuentro un poema antiguo y recuerdo de repente lo que es perder la casa, perder el barrio, perder la piel. Recuerdo lo que es romperse en pedazos, sustituir las piezas rotas y retomar de nuevo el ciclo de siempre: mudar la casa, mudar el barrio, mudar la piel; hibernar y esperar a que aparezca alguna pieza del puzzle. Tatuar la palabra h-o-g-a-r sobre los negativos, tapar con salitre las marcas negruzcas que cubren la piel. Encuentro versos antiguos, rescato los pedazos, coso con hilos malvas las esquinas donde amé. Encontrar una casa, encontrar un barrio, encontrar una piel. Mirar a través de los negativos. Encontrar un poema antiguo. Y saberse vivo, aunque sea un segundo, sin tener que pellizcarse la piel.
Hacer el amor con desconocidos
como quien se pellizca la carne
para saber si sigue vivo.
ser habitado y habitar:
biografía en negativo.
(Otoño 2010)